El autoconcepto es la opinión que una persona tiene sobre sí misma y que lleva asociado un juicio de valor. Autoconcepto no es lo mismo que autoestima, sin embargo, su relación es muy estrecha y no podría entenderse uno sin la presencia del otro. Hace referencia a la conciencia que tenemos de nosotros mismos, de nuestras emociones y de la valoración que hacemos de todo ello. El autoconcepto no sólo es una percepción con tinte emocional y valorativo de uno mismo sino que también se ve alimentado por las influencias de ideas asociadas entre sí, la cultura, religión, educación familiar, etc.
En definitiva, el autoconcepto es el conjunto de características (estéticas, físicas, afectivas, etc.) que sirven para definir la imagen del "yo".
Aunque tienda a mantenerse relativamente igual en el tiempo, el autoconcepto no es ni mucho menos algo estático. Está variando constantemente, al igual que varían constantemente nuestras experiencias y el curso de nuestros pensamientos.
Beneficios de tener un buen autoconcepto:
No hay aventura más maravillosa que profundizar en nuestro interior. Saber lo que nos motiva, lo que nos gusta, lo que queremos, por qué hacemos las cosas, por qué no las hacemos...Esta es la maravillosa aventura de vivir de dentro hacia afuera, asentándonos en nuestro interior.
Gracias al conocimiento de uno mismo podemos:
Reconocernos como seres únicos y especiales
Comprender y conocer a los demás
Aceptarnos y amarnos incondicionalmente
Tomar decisiones de forma consciente
Poner nuestras habilidades al servicio de nuestra mejora personal y al bienestar común.
Desarrollar nuestra creatividad
Avanzar hacia la mejor versión de nosotros mismos.